
El CONFINAMIENTO INCREMENTÓ El NÚMERO DE LECTORES SEMANALES DE LIBROS A SU MÁXIMO HISTÓRICO
- En 02/03/2021
- El porcentaje de lectores de libros que leen por lo menos una vez a la semana alcanzó el 52,7%, en 2020 y llegó a un máximo histórico del 57% durante el confinamiento
- El tiempo dedicado a la lectura también se incrementó, pasa de 6 horas y 55 minutos antes del confinamiento a 7 horas y 25 minutos, la finales de 2020. Durante el confinamiento alcanzó las 8 horas y 25 minutos semanales.
- Al 81% del lectorado, la lectura le ayudó a “llevar mejor la situación durante el confinamiento”.
- El 68,8% de los mayores de 14 años leyó libros a lo largo de 2020. Un 64% tiene la lectura como una actividad de ocio, en su tiempo libre. Un 23,1% lee por trabajo o estudios. El 36% de la población no lee nunca o casi nunca libros.
- El incremento en el número de lectores por ocio en tiempo libre fue generalizado en todas las comunidades autónomas. Cataluña y Andalucía fueron las que registraron más incremento: 2,3 puntos.
- La lectura de libros en formato digital sigue creciendo, el 30,3% de los mayores de catorce años leen en este formateo, por lo menos una vez por trimestre.
- Un 51,7% compró libros (no de texto) en 2020, un 1,3% más que en 2019. La librería tradicional se mantiene cómo principal canal para la compra y crecimiento en 2020.
(Santiago de Compostela, 2 de marzo de 2021) El confinamiento tuvo un efecto positivo sobre los índices de lectura en nuestro país que crecieron a lo largo de 2020. Esta es una de las principales conclusiones del Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2020, que fue presentado la semana pasada por el Ministro de Cultura e Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, y el presidente en funciones de la Federación de Gremios de Editores de España ( FGEE), Patrici Tixis.
Este estudio, elaborado para la FGEE, con el patrocinio de CEDRO y en colaboración con el Ministerio de Cultura y Deporte, muestra como la lectura y el libro ayudó a buena parte de la población, a soportar un año complicado, especialmente durante el período de confinamiento, lo que claramente refleja que el libro es un bien considerado de primera necesidad para muchas personas. Esto se manifestó tanto en el incremento del índice de lectura, especialmente en la lectura frecuente (por lo menos semanal), como actividad de ocio, y en el tiempo dedicado a esta. En concreto, los datos reflejan que, en 2020, el 68,8% de la población del Estado leyó libros. De estos, un 64% lo hizo por ocio, en su tiempo libre. El 23,1% leyó por trabajo o estudios, porcentaje que cae con respecto a 2019 (27,5%).
Aunque el porcentaje total de personas que leyó un libro en 2020 creció ligeramente (0,3 puntos), el Barómetro refleja un incremento en el porcentaje de lectores en tiempo libre, que pasa del 62,2% en 2019 al 64%, y acumula una subida de 7 puntos porcentuales en el últimos diez años. Más significativamente aumentó el porcentaje de lectores que leen de forma frecuente (diariamente o por lo menos una vez a la semana), que pasa del 50% al 52,7%.
El Barómetro recoge el importante crecimiento que se produjo durante las semanas de confinamiento durante las que el porcentaje de quien leyó con una frecuencia por lo menos semanal alcanzó el 57%, máximo histórico. Una parte significativa del incremento en lectura generado por el confinamiento se mantuvo una vez que finalizaron las restricciones de movilidad. Hay que señalar que fue entre la población menor de 35 años donde se produjo el mayor crecimiento de lectores frecuentes, especialmente entre la franja de población entre 25 y 34 años.
Hay que destacar además que la lectura tuvo un efecto positivo a la hora de soportar el confinamiento. El 81% de las personas entrevistadas reconocieron que los libros les ayudaron a llevar mejor la situación, con beneficios como el entretenimiento o la desconexión, también proporcionó alegría, tranquilidad y relajación.
Creciminto de lectores en todas las Comunidades Autónomas
El incremento en el número de lectores por ocio en tiempo libre fue generalizado en todas las comunidades autónomas. El crecimiento fue mayor en Cataluña y Andalucía, donde subió 2,3 puntos respeto del 2019. Baleares y Castilla y León fueron las que registraron un menor incremento; 0,7 y 0,8, respectivamente. También significativo es el incremento del tiempo dedicado a la lectura que pasó de 6 horas y 55 minutos antes del confinamiento a 7 horas y 25 minutos, una vez finalizado el confinamiento. Cabe señalar que durante este alcanzó las 8 horas y 25 minutos semanales. Si realizamos un análisis más en profundidad de la lectura por regiones se observa que Galicia se encuentra muy cerca de la franja de las CC. AA. Con menor se incrementó el número de lectores. Y a pesar de la mejora de los índices de lectura en tiempo libre en todas las comunidades autónomas, sigue habiendo grandes desequilibrios se comparamos las regiones donde más se lee, Madrid, País Vasco, Navarra y Cataluña con aquellas donde se lee menos, Extremadura, Canarias, Andalucía y Castilla-La Mancha.
Desequilibrios que también se producen tanto en los diferentes tramos de edad, como por nivel de estudios. En cuanto a la edad, el tramo con mayor población lectora es la comprendida entre los 14 y los 24 años (73,8% de población lectora en tiempo libre). A partir de los 25 años se produce una caída en los índices de lectura (64,2%).
Se recupera entorno de los 35 años y vuelve a caer de forma significativa entre la población con edad superior a los 65 años (49,2%).
Lectura en formato digital
El 30,3% de la población mayor de catorce años lee libros en formato digital por lo menos una vez al trimestre. Este porcentaje es 1,2 puntos superior a la inscrita en 2019. Los lectores que leen libros en formato digital emplean en mayor proporción los e- readers (12,6%) y el ordenador (12,5%). También es significativa la lectura de libros a través de tableta (10,1%) y del móvil (6,2%).
Compra y adquisición de libros
Si el porcentaje de lectores de libros creció en 2020 también lo hizo el porcentaje de compradores. El 51,7% de la población compró un libro en este año. Esto representa 1,3 puntos con respecto a 2019. Si analizamos el ocurrido desde 2010, el porcentaje de compradores de libros se incrementó en 11 puntos porcentuales. Un año más, el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros pone de manifiesto que las librerías son los lugares preferidos por los lectores para acceder a los libros, lo que los convierte en establecimientos que han de ser preservados y ayudados, especialmente en situaciones como las que actualmente se están viviendo. La librería tradicional se mantiene cómo el principal canal de compra de libros no de texto. Un 71,1% de los compradores eligieron estos establecimientos para la adquisición de algún ejemplar. Le sigue Internet como canal de compra (incluidas las plataformas de las librerías), que fue elegido por el 38,4% de las personas compradoras en alguna de sus adquisiciones. Entre la población con edades comprendidas entre 25 y 44 años, este porcentaje sube hasta el 49%.
Información completa: FGEE
Gráficas extraídas del Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2020
(Conecta)